Hackeando el concepto “oficina” y la forma tradicional de trabajar
Por Agathe Lecuru, apasionada de la sostenibilidad y la innovación
¿Cómo diseñar espacios saludables y habitables en los que trabajar, vivir y conectar con otras personas? La pandemia ha revolucionado el concepto de “lugar de trabajo”. Ha pasado de un lugar fijo en el seno de una empresa a un entorno más flexible.
Diseñar espacios adecuados que contribuyan a mejorar la calidad de vida de las personas además de mejorar su rendimiento profesional es uno de los retos de la Nueva Economía del siglo XXI. Por suerte, en la 3ª edición de NESI Global Forum, el Foro de Nueva Economía e Innovación Social, éste ha sido uno de los temas a tratar y debatir.
Bajo la temática Hacking Work se enmarca el panel Nuevos lugares para vivir y trabajar “Diseñando oficinas y casas vs Diseñando espacios saludables y habitables» que contó con la participación de los EcoHackers Iñaki Alonso, arquitecto y CEO de Satt Arquitectos y miembro de SANNAS, Óscar García Toledo, CEO & Founder First workplaces, Pilar Llacer, director Work of the Future Center y como moderadora a Susana Carrizosa, co-fundadora de Wikigrado.
Comenzamos la sesión con una breve retrospectiva de la historia del teletrabajo, en la que Pilar Llacer nos recordó su objetivo principal «acercar el trabajo al trabajador». ¿Quién pensaba en los años 70 que esta práctica innovadora nacida en Estados Unidos iba a tener tanto éxito en la época de la pandemia mundial del Covid19?. Aunque el trabajo a distancia no era tan común hasta ahora, la pandemia tuvo el mérito de enseñar a las empresas a confiar en sus empleados. Pero frente a esta nueva forma de trabajar surgieron algunas preguntas.
¿Cómo conciliar la vida personal y profesional estando todo el día en casa? ¿Todos tenemos que trabajar a distancia? ¿Cómo seguir teniendo un contacto social tan esencial tanto a nivel personal como profesional? ¿Cómo tiene que ser la oficina del futuro?
El trabajo remoto nos hace vivir más conectados, pero más solos. Iñaki Alonso lo tiene muy claro “hay que reconstruir las relaciones entre las personas y con el medio ambiente”. ¿La solución? Los espacios de coworking, espacios de trabajo más amables, humanos que afectan de manera positiva nuestro ánimo y nuestra productividad. En concreto, ¿cómo funciona? Un coworking ofrece puestos de trabajo, cafetería, salas de reuniones… En definitiva, todas las instalaciones habituales de las oficinas corporativas, pero a personas que suelen trabajar solas en casa.
Oscar García Toledo, nos recuerda un concepto clave: “la flexibilidad”. El trabajo a distancia da más libertad, de manera que el trabajo ya no se evalúa en presencialismo sino en cumplimiento de tareas. El coworking es un lugar para sacar provecho de esta flexibilidad. Es una solución para evitar los desplazamientos diarios de los empleados hacia una oficina lejana, generar relaciones humanas y engendrar proyectos con propósito transformador de la sociedad. “No es flexibilidad por flexibilidad, debe tener un fin”. Las empresas tienen que analizar sus necesidades según su modelo de negocio, la cultura empresarial y las personas y preguntarse realmente si alquilar un coworking es una solución viable y eficiente para ellos.
El coworking es un espacio de innovación conjunto y si todavía teníamos dudas sobre sus beneficios para los empleados como para las empresas aquí tenemos los puntos claves de las intervenciones de los EcoHackers:
- Los hábitos de consumo digitales y los objetivos de desarrollo sostenible van a determinar dónde se va a crear trabajo en el futuro.
- Hay que dar un sentido diferente a la oficina. La oficina ya no tiene que ser un lugar donde se ejecuta tareas porque cualquiera lo puede hacer desde casa. Sino que un espacio de formación, desarrollo profesional ligado al tema de las competencias y eventos de transferencia de conocimiento.
- Un coworking tiene que ser un entorno confortable donde uno puede desarrollar de manera profesional su trabajo y no tener incomodidades personales.
- El coworking no solo es una oportunidad para el Objetivo 17 (Alianzas para lograr los objetivos) de los ODS sino porque el relacionarse con gente diferente tiene beneficio para hacer crecer el negocio, aumenta la sinergia y aumenta la empleabilidad
El diálogo finalizó con el consenso en que el diseño adecuado de los espacios contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas además de mejorar su rendimiento profesional, impulsando así la Nueva Economía del siglo XXI, una nueva economía que ya se recoge en el Plan A, Economía para la Vida, con 38 estrategias y 383 propuestas para ser líder en innovación y sostenibilidad. Se trata de un programa de política económica, liderado por NESI y elaborado conjuntamente por más de 70 organizaciones y 5.000 ciudadanos, que plantea un modelo transformador alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el Acuerdo de París y centrado en las personas y el planeta.
Bajo el lema, “EcoHackers, hackeando la economía en positivo” el Foro ha invitado a todos los asistentes a hacer un reseteo global a todos los niveles para preguntarnos qué desaprendizajes mentales o cambios de hábitos tenemos que hacer como sociedad para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030.